Diez años

He tardado diez años en escribir mi novela. ¿Ha merecido la pena?

Yubran Najem García de Vinuesa

4/17/20251 min read

Diez años obsesionado con una sola idea.

Y cuando digo obsesionado, lo digo en toda la extensión de la palabra. No recuerdo una sola noche, en la última década, en la que me haya dormido sin pensar en un diálogo, un concepto, una situación... cualquier cosa remotamente relacionada con Víctimas del Mal. Y no, no siempre se llamó así.

Primero fue El Octavo Demonio, luego El Quinto Dios, y otros tantos títulos genéricos que, como remate, revelaban con descaro las tramas primigenias. —¿Tramas primigenias?— te preguntarás. Sí, en diez años da tiempo a sufrir más de una crisis creativa, de esas que te hacen descender a los abismos de la locura, obligándote a borrar todo el manuscrito que con tanto esfuerzo has creado para empezar de cero. Y no una, sino varias veces.

Vale, sé que no estoy pintando la experiencia de crear un universo ficticio como algo romántico y apasionante. Así que vuelvo a preguntarme: ¿Ha merecido la pena? Sí. Sin duda, sí, y siempre responderé lo mismo. Ha sido un camino lleno de frustración, dudas, inseguridad... pero también de descubrimiento, alegría y una realización personal que es difícil de explicar.

Y no, no he realizado esta odisea en solitario. No podría haberlo hecho. Mi familia, mi pareja, mis amigos... esas almas luminosas que han sido mi antorcha en la oscuridad. En los peores momentos, cuando la idea de abandonar no solo susurraba, sino que me gritaba con vehemencia, ellos estaban ahí: —Al menos, termínala. Y luego ya se verá.

No tengo palabras suficientes para agradecer a todos los que me han acompañado, aguantado y animado en este viaje. Y a quienes aún no me conocen: gracias también. Por estar aquí, por leer esto. Por ser una razón más para seguir adelante con esta hermosa obsesión.